ALBANIA, LA EUROPA INVISIBLE

Hablar de Albania es bastante difícil. La información que existe sobre este país o bien esta muy condicionada por una visión particular y en exceso polarizada sobre los albaneses o bien se encuentra dentro del ámbito de los estudios muy especializados. Pero es que además Albania es un pais que los medios de comunicación occidentales ignoran adrede, más que nada porque profundizar en exceso en la información relativa a este país nos descubre que la OTAN es una organización criminal, y que los EEUU no fueron a Afganistan a "liberar" a las oprimidas mujeres afganas, sino a traficar con heroina. Pues si, asi de crudo y brutal. Y me voy a explicar...

Habitualmente cuando en los medios buscamos información sobre Albania encontramos tres cliches repetidos "hasta el infinito y más alla": Mafia albanesa, pobreza endémica y alusiones al pasado comunista de Albania con adjetivos del tipo "La Corea del Norte europea". Y poco más hay que rascar. Comprendo que a estos medios lo que les interesa es vender, y estas historias truculentas tienen mucho jugo que exprimir. 

Pues aunque parezca increible, Albania es un país, y no todos los albaneses son mafiosos.

A tan solo 72 km de la costa italiana Albania parece que esta lejisimos de Europa. En la actualidad, Albania por tierra se encuentra rodeada de paises nacidos de la desmembración de Yugoslavia, y su situación de vecindad con esta exrepública comunista ha llevado al país a verse inevitablemente afectado e implicado en el rediseño de soberanias impulsado por EEUU y la UE en la zona.

En la antiguedad Albania era el "patio trasero" del Imperio Romano. Ni era una región desconocida ni lejana, ni mucho menos era considerada como barbara por los romanos. Para el Imperio romano, la actual Albania era un territorio familiar donde muchos senadores y terratenientes romanos mantenian propiedades y villas. 

Es cuando pasa a formar parte del imperio Otomano (1443-1468) cuando, para el resto de Europa, Albania como región, desaparece. Hubo que esperar hasta el año 1912  para el reencuentro, y fueron austriacos e italianos quienes rapidamente se apresuraron a reconocer la independencia y soberania de Albania. En el fondo la única intención de estas potencias europeas, su único interes, era convertir a Albania en un peón en sus juegos de estrategia balcánica, para oponerse al expansionismo serbio y montenegrino. 

Tras la Primera Guerra Mundial , Albania acabó despedazada (literalmente) y bajo el control al norte de Serbia-Montenegro y al sur de Grecia. En 1918 Albania vuelve a proclamar su "independencia", una vez más, una falacia, pues de facto se estaba convirtiendo en un protectorado italiano. Con la llegada del fascismo a Italia, parece que lo del protectorado a Mussolini le sabía a poco, y el 8 de abril de 1939 los ejercitos de la Italia fascista tomaron Albania por la fuerza. Lo que siguió despues es bien conocido, el fracaso de la conquista italiana al enfrentarse a los partisanos albaneses y el posterior fracaso de la alemania nazi que tomó el relevo de Italia frente los mismos partisanos cada vez más cercanos al bolchevismo y dirigidos por Enver Hoxa. Tras el final de la Segunda Guerra Mundial, Albania se convirtió en la República Popular de Albania y en 1955 pasó a formar parte del Pacto de Varsovia. 

Enver Hoxa, lider del Partido Comunista Albanes

Con Enver Hoxa al frente, Albania luchó por modernizarse y emular los logros económicos y sociales de la Unión Soviética, con escaso exito todo hay que decirlo. Pero no fue por falta de predisposición o ganas del pueblo albanes sino más bien por la dificil situación geográfica y los escasos recursos del país. 

Albania era no solo un país devastado por la guerra, practicamente habia sido triturado por los italianos primero y por los alemanes despues, además era un país que había vivido sumido en la Edad Media hasta el final de la Segunda Guerra Mundial. De modo que a la devastación de la guerra había que sumar el hecho de ser el país más retrasado, abandonado y pobre de toda Europa. No existía ningún tipo de infraestructuras, ni carreteras, ni ferrocarril, ni una industria competitiva ni tan siquiera universidades que fueran el germen intelectual o científico de una posible reconstrucción. Los albaneses tuvierton que partir directamente de números rojos. 

En los primeros años de su existencia la Rep. Popular de Albania recibió mucha ayuda de Yugoslavia y de la Unión Soviética, algo nuevo para los albaneses, que otros paises les proporcionaran ayuda económica y les ayudaran a levantar el país. Esta novedad forjó lazos de unión y agradecimiento con Yugoslavia y con la Unión Soviética. Lazos que en el caso de la Unión Soviética, se vieron truncados con la llegada de Kruschev al poder y el revisionismo que dejaba al anterior mandatario soviético, Stalin, en muy mal lugar. Para los albaneses Stalin, no habia sido un cruel tirano, sino el lider político que por primera vez en su historia se habia dignado a ayudar a Albania economicamente y con el que habian logrado erradicar el analfabetismo. Esto quizas, explique el motivo por el que las relaciones con la Unión Soviética sufrieron un progresivo enfriamiento. Pero es que ademas las sospechas de Hoxa de que el Mariscal Tito, máximo dirigente yogoslavo, pretendia incorporar a Albania a la Rep. Yugoslava contribuyeron a un progresivo aislamiento de Albania. A partir de entonces la política exterior de Albania pasa por distintos periodos de acercamiento y ruptura con varios paises, pero los años dorados del padrinazgo sovietico no regresaron.

Asi las cosas y tras la muerte de Enver Hoxa en 1985, Ramiz Alia toma el relevo y con los acontecimientos de Rumania en 1989 que llevaron al derrocamiento de Çeausescu, Alia tomá la decisión de convocar elecciones pluripartidistas. En 1992 gana el Partido Democráta por mayoria absoluta. 

La entrada de Albania en el mundo capitalista fue como un jarro de agua fria. En 1997 los albaneses son victimas de una monumental estafa financiera de tipo piramidal denominada esquema Ponzi.

Esto provocó un empobrecimiento inmediato y brutal de toda la sociedad albanesa que se vió obligada a recurrir a créditos y financiación europea. Una vez más los albaneses tiene que partir de cero. El unico salvavidas de Albania es la agricultura minifundista, hasta hace poco en manos de pequeños propietarios, familias que tenian en la agricultura su único modo de superviviencia.  

En Albania se puede observar, como en la mayoría de los estados post-socialistas, una estructura económica que tiene sus bases fuera del país. Esto quiere decir que el mismo país no genera la suficiente riqueza para proveer a sus habitantes de alimentos y otros bienes de consumo cotidiano. Tampoco tiene una industria que constituya un contrapeso de exportación ante las importaciones necesarias de estos productos básicos.

El FMI y el Banco Mundial en los años 80 elaboraron su sistema de tutela sobre las economías del Tercer Mundo. Los créditos concedidos por bancos comerciales y las deudas contraídas por los propios estados se gestionaron con asesores de éstas instituciones. La deuda creció, y las condiciones para mantener su crédito en el mercado mundial se endurecieron. Para recibir nuevos créditos los estados tenían que someterse a las condiciones impuestas por el FMI y el BM, lo que significaba: Dejar de fomentar industrias nacionales o exportaciones agrícolas, cortar el empleo público y congelar los sueldos en este sector ( esta historia seguro que nos resulta familiar). Todos los créditos que se conceden vienen acompañados de instrucciones para el gobierno albanés. Este gobierno se encuentra bajo tutela de instituciones internacionales. Pero la deuda albanesa sigue creciendo, ya que el país produce menos de lo que consume. El déficit comercial como contrapeso solamente tiene las remesas de los emigrantes, y esto no basta para equilibrar la diferencia entre importaciones y exportaciones. Aún así, son el único remedio de Albania contra la quiebra. En 1997, después del fracaso de los esquemas piramidales y la descomposición del gobierno albanés como consecuencia de una rebelión popular, una fuerza multinacional se encargó de “poner en orden” em el país, lo que significaba ante todo acordonar Albania para que sus habitantes no pudiesen escapar y así se evitaba “ensuciar” los países vecinos con su presencia no deseada.

La mafia albanesa, un capitulo aparte.

El crecimiento exponencial que experimentó la delincuencia organizada en Albania tiene su origen fundamentalmente en lo que se llamó "Levantamiento de la loteria" o "Anarquia en Albania", tras el descubrimiento en 1997 de la gran estafa piramidal en la que el gobierno del Partido Democráta estaba implicado. Las revueltas civiles desembocan en el asalto a comisarias y armerias del ejercito. Las fuerzas de seguridad se disolvieron y el ministro de defensa huyó del país. Mas de medio millon de armas de todo tipo cayeron en manos de todo tipo de grupos y grupúsculos y una serie de vendetas familiares asolaron el país una vez más y  provocaron la intervención de la ONU y el envio de una fuerza internacional compuesta sobre todo por militares italianos y asesores estadounidenses. 

La mayor parte de las armas acabaron en manos de grupos de delicuentes y sobre todo en la vecina Kosovo en manos del UÇK, el "Ejercito de Liberación de Kosovo" que inició su guerra independentista contra Serbia. La situación en Albania lejos de mejorar con la intervención militar internacional empeoró. El 25% de la población estaba en el paro y cinco de cada siete albaneses vivia en la pobreza extrema. La definitiva instalación de un contingente de la KFOR en Albania y Kosovo ha servido para alimentar la rebelión kosovar, que tenia en Albania refugio, centro de avituallamiento e instrucción, recibida de los asesores militares estadounidenses. Rapidamente la mafia albanesa se integró en los engranajes que alimentaban la guerra kosovar, proorcionando financiación y armas mediante los beneficios obtenidos por el trafico de drogas y la prostitución. Los primeros clientes 

de las redes de prostitución albanesas fueron los mismos militares de la KFOR, como destaparon algunos medios de forma puntual a principios del año 2000. Pero además la mafia albanesa es la principal distribuidora de heroina en Suiza, Belgica, Italia y Austria. La mayor parte de esta heroina proviene de Afganistan. Otra de las drogas con la que habitualmente trafican es el cannabis ya que en el mismo territorio montañoso albanes existen cultivos de esta planta. 

Reclutan a exmilitares y exmiembros del UÇK para formar bandas de ladrones que actuan en España, Francia e Italia con métodos brutales y muy agresivos. El dinero que obtienen de sus redes de drogas y prostitución termina siendo reinvertido en lo que se pretende que sea el "futuro" de Albania: el sector turístico. Actualmente Albania, gracias en parte a la promoción de "Lonely Planet" se ha convertido en uno de esos destinos turísticos "singulares" y alternativos. Y no es que el país no tenga encanto o que sus gentes no sean hospitalarias, que lo son. El problema es que la construcción masiva de complejos hoteleros conlleva no solo el blanqueo de capitales provenientes de la actividad delictiva, es que ademas muchos pequeños propietarios estan viendo como pierden sus viviendas y tierras en pos de este nuevo mercado turístico. Paisajes naturales que hasta la fecha habian permanecido virginales son aplastados por el ladrillo. 

Otro de los detestables negocios de la mafia albanesa es el expolio y venta de antiguedades. El patrimonio histórico y arqueológico albanes sufre la atroz voracidad de gentes que venden los frescos arrancados de las paredes de antiguas iglesias ortodoxas o los bellos artesanados de mezquitas otomanas por miseras cantidades de dinero. Estas antiguedades terminan en manos de ricos empresarios y banqueros europeos o incluso en manos de la mismisima Reina de Inglaterra como se descubrió no hace mucho.

En este estado de cosas el futuro de Albania es más negro que el fondo de un pozo de petroleo saudí. Pero no olvidemos el hilo conductor con el que inicie este post, Albania es un país y los albaneses son seres humanos, no son todos mafiosos o deliencuentes, son tan solo personas desesperadas a las que la moderna Europa prefiere tener escondidos en un ricón de los Balcanes.