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martes, 12 de mayo de 2015


DIRIGIBLES

Hubo un tiempo en el que subirse a un avión para hacer un viaje era lo más parecido a que te molieran a palos y te reventaran los timpanos, todo en una sola sesión. Los aviones eran tremendamente incomodos. El pasajero se subia a un aparato con inestables asientos de mimbre y la cabina del pasaje era una camara amplificadora del ruido de los motores. El efecto inevitable eran los vomitos, mareos y cervicales machacadas. Pero desde el año 1900 hasta el año 1930 habia otro método de viajar por los cielos. Un método que era lo más parecido a engancharse a la panza de una nube y flotar: los dirigibles, más conocidos como "zeppelines".




 Los dirigibles han sido los artefactos voladores más grandes que jamás han surcado los cielos. Como enormes cachalotes flotantes navegaban majestuosos. ¿Cómo funciona un dirigible? Pues basandose en un principio físico que estableció Arquimides dos siglos antes de Cristo, a saber:  

"Todo cuerpo sumergido en un fluido recibe una fuerza de abajo hacia arriba equivalente al peso del fluido desplazado."

Curiosamente los dirigibles no necesitan de un volante o palancas manuales para ser controlado. Lo fundamental para el manejo de un dirigible son los pedales que controlan los timones y una rueda para controlar la presión del aire dentro del globo.
Existen tres tipos de dirigibles, el rigido, que cuenta con un armazón interno donde se ubican los globos, el no rigido que carece de estas estructuras y los de membrana metálica.  Inicialmente los dirigibles estaban confeccionados con intestino de vaca. Los alemanes, que fueron pioneros y lideres en la construcción de dirigibles, tenian factorias con más de 16.000 mujeres dedicadas en exclusiva a la limpieza de intestinos de vaca. Desgraciadamente para las vacas, eran necesarias las tripas de medio millon de ellas solo para construir un dirigible. Los alemanes no tardaron mucho en darse cuenta de que este material era poco rentable. De modo que empezaron a usar un tipo de tela de algodón especialmente preparada con un revestimiento que prevenia al dirigible de la peligrosa electricidad estática que podia hacer estallar el aparato. Porque estos aparatos podian estallar de un modo terrible. Los alemanes usaban hidrogeno para llenar las bolsas de aire que se encontraban en el interior de la estructura rigida del zeppelin. El hidrogeno es un gas muy ligero que era extremadamente inestable e inflamable. Si se mezcla con el aire, prende a gran velocidad. Por ello los alemanes, meticulosos como nadie, tomaron medidas de seguridad que impedirian cualquier fuga accidental.
Exhibición del LZ 129 Hindenburg durante los juegos olímpicos de Berlin.
Aunque durante la Primera Guerra Mundial se intentó utilizar estos aparatos como armas de guerra, para este proposito se mostraron bastante ineficaces. Al principio se les dió la tarea de plataformas de observación, para descubrir las posiciones y movimientos de tropas enemigas. Pero su tamaño y fragilidad los hacian vulnerables incluso a los disparos de los fusiles del humilde soldado de infanteria. También se intentó realizar bombardeos con ellos, y tampoco dieron buenos resultados en esta empresa, siendo poco precisos y con un poder destructivo muy limitado. No podian volar a gran altura por lo que se les descubrian facilmente y eran presa de los aviones biplanos de caza.
Los Estados Unidos durante la Segunda Guerra Mundial , sacaron mejor partido de ellos usandolos para vigilar las costas del Pacifico de las incursiones de submarinos japoneses, y aqui si obtuvieron un relativo exito. También existian proyectos para convertirlos en plataformas volantes para aviones de caza y vigilancia. De hecho algunos dirigibles estadounidenses lograron llevar hasta cuatro aeroplanos de este tipo en mini hangares colocados en la panza del dirigible. Pero la dificultad de la maniobra de desengache y reenganche de los aviones y el mejor rendimiento de los portaaviones hicieron que muy pronto la idea fuera descartada.


El dirigible estaba destinado a ser una artefacto para navegar entre las nubes. A pesar de lo inestable del hidrogeno, hasta 1936 nunca hubo un accidente por el uso de este gas. La seguridad que los ingenieros alemanes de la empresa Zeppelin habian establecido rayaba en la perfección. El Hindenburg, el Zeppelin más famoso y casi tan largo como el mismisimo Titanic (media 245m de longitud), habia recorrido en un solo año 482.000 Km. Era el orgullo tecnológico del III Reich.


Impulsado por cuatro motores Daimler-Benz, el Hindenburg ofrecia viajes de Berlin a Nueva York en tan solo dos dias. En comparación con el transatlántico cuyo viaje podía prolangarse hasta dos semanas, el zeppelin no tenia rival. Pero era un método de viaje solo al alcance de los bolsillos más adinerados. El Hindenburg tenia capacidad para llevar hasta 72 pasajeros, más una tripulación de 61 personas. Un billete de ida costaba lo mismo que un automovil, y el precio de un billete de ida y vuelta equivalia al precio de una vivienda modesta en los Estados Unidos.

A diferencia de los dirigibles anteriores el pasaje no viajaba apelotonado en la barquilla del dirigible. Gran parte de las cabinas de pasajeros iban empotradas en la panza del zeppelin. El lujo del zeppelin no tenia comparación: Dos cubiertas, un comedor y un salon con muebles muy ligeros de estilo Bauhaus. Las cabinas eran tan lujosas como las habitaciones de un hotel de cinco estrellas. Incluso se diseñó expresamente para el Hindenburg un piano de aluminio que pusieron en el  salón de la nave. Para rizar el rizo, tenia un salon de fumadores, algo que en un dirigible de hidrogeno podria parecer un suicidio, pero era una cámara estanca a presión, donde solo habia un encendedor electrico (estaba prohibido subir al dirigible con cerillas).

Finalmente las dieciseis bolsas de gas hidrogeno que sustentaban el Hindenburg le dierón a la majestuosa nave su golpe de gracia. El 6 de mayo de 1937 el Hindenburg iniciaba las maniobras de atraque en la Estación Aeronaval de Lakehurst (Nueva Jersey), cuando sucedió la tragedia.(Hindenburg Disaster Real Footage (1937) )
El zepellin estalló ante los asombrados ojos de los espectadores y de la prensa que filmaron el accidente para la posteridad. Las causas de la explosión continunan siendo un misterio, pero la rapidez con la que la nave ardió tienen su origen en el revistimiento de polvo de aluminio que cubria la nave. Este tipo de revestimiento se usa actualmente como fulminante en los explosivos tipo termita. El hidrogeno en combustión llegó a alcanzar los 3000º de temperatura. Fallecieron 36 personas de las 97 que iban a bordo, la mayoria quemadas por el fuego o aplastadas por la estructura interna del dirigible. El desastre podia haber sido mucho peor. En el futuro estaba previsto que el zeppelin atracara en pleno centro de Nueva York, concretamente en la aguja del rascacielos Empire State (En la pelicula "Sky Captain" podemos ver una recreación de esa idea) Los zepelines debian ser amarrados a una estructura de aguja por el extremo delantero, con anclajes pivotantes y rotatorios para que pudiera moverse al viento como una bandera.
Las imagenes del desastre recorrieron el mundo entero e ironicamente serian una metáfora de lo que el III Reich terminaria por ser para el mundo, un gran y mortal desastre. Alemania abandonó la fabricación de los zeppelines en favor de una industria aeronaútica en la que tambien despuntaron, ofreciendo al mundo los primeros aviones a reacción.


La llegada de la aviación moderna terminó por enviar a los dirigibes al cajón del olvido, pero desde los años 80 un grupo de ingenieros de Loockhed Martin recuperaron la idea. Los dirigibles estadounidenses no usaban hidrogeno, usaban helio. Los Estados Unidos eran el único pais que poseia este gas y desde los comienzos de su industria del dirigible usaron el helio en vez de hidrogeno. El helio no es tan ligero como el hidrogeno pero en cambio no es inflamable.


A pesar de que los dirigibles han quedado como simples plataformas publicitarias o como gondolas para paseos aereos de turistas, ultimamente se les estan buscando otros propositos: Vigilancia de bosques en la lucha contra el fuego o para la observación de vida salvaje. Los nuevos materiales estan abriendo la puerta para la construcción de dirigibles que sean capaces de alcanzar alturas estratosféricas y la posibilidad como medio de trasporte no contaminante preveen que en el tema de los dirigibles todavia queda algo por decir.     
                                                   

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